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Tiempo de cambio


No es tiempo de vanidades sino de reflexión. Para mi lo que estamos viviendo nos enseña varias cosas. La primera es poder estar bien con uno mismo, a sentirnos tranquilos en soledad y en nuestro hogar. Somos seres sociales, pero para dar lo mejor tenemos que cada día sacar lo mejor de nosotros. Aprender a manejar nuestros pensamientos y emociones es esencial porque eso nunca nos soltará. Soy única hija y me crié entre adultos, así que desde niña he aprendido a contentarme con la soledad y conmigo misma. Aún así cuando comenzó la pandemia tuve momentos difíciles porque al menos estaba acostumbrada a salir una vez por semana. También la incertidumbre de esta nueva enfermedad me causaba miedo. Sin embargo, con apoyo y mecanismos para manejar los pensamientos pude seguir adelante. Los nuevos comienzos no son fáciles, pero son necesarios. Luego nos damos cuenta que aprendemos y crecemos con ellos. 


Otra enseñanza es que lo material no debe ser prioridad. Estamos acostumbrados a vivir comprando lo último en la moda y a darnos gustos siempre que podemos. Pero esta situación nos llevó a dejar esto a un lado. No es que dejemos de darnos nuestros gustos, si podemos, sino que eso debe estar en segundo plano. Ahora por la mascarilla el maquillaje casi no se ve. Si no salimos todo el tiempo no necesitamos ropa nueva. En mi caso me he dado cuenta que tengo ropa que ni recordaba, al igual que accesorios. 


Lo esencial en este tiempo es cuidar nuestra salud y la de los que nos rodean. También es importante cultivar la paz interior y tener mecanismos que nos generen bienestar. Poder tener ejercicios de respiración que nos funcionen, pasatiempos que podamos realizar en el hogar, continuar la comunicación con nuestros seres queridos, poder manejar lo que sentimos y pensamos. 


Es tiempo de conectar. Conectar con nuestro interior y reconocer lo que nos favorece y lo que no. También conectar con los que amamos, ya que en este tiempo tenemos medios de comunicación desde vídeos, mensajes, llamadas, redes sociales, etc. Pienso que este tiempo es de aprendizaje y si aprendemos a aprovecharlo cuando termine seremos mejores que cuando comenzó. Tengamos fe y esperanza. 

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