Ya solo quedan semanas para que el año se acabe, pero no tenemos que esperar a la llegada de un nuevo año para cumplir metas o comenzar proyectos. Muchos se ponen como resolución dejar los malos hábitos. También otros ponen como metas alejarse de personas tóxicas o de lugares. ¿Pero, qué tal dejar ir el pasado?
A veces nos aferramos a recuerdos de personas que ya no son iguales o a momentos que ya no volverán. Creando pensamientos que nos llenan de nostalgia y tristeza. Para mi son recuerdos tóxicos, ¿para qué seguir aferrados a algo que ya no está o no es igual? Cuando puedes vivir el presente al máximo y crear nuevas y mejores memorias.
A veces cuando nos quedamos aferrados a un recuerdo, cada situación que vivimos la comparamos con esa que fue tan especial, esto puede ocurrir de manera subconsciente. Y al comparar tal vez no valoramos como debemos el presente. Por eso es tan importante analizar nuestros pensamientos, porque son ellos los que guían nuestras acciones y sentimientos. Cuando estamos conscientes de los pensamientos podemos crear unos positivos y centrados en el presente.
Bien dicen que la depresión es exceso de pasado, así que vivir en el pasado no es bueno. Claro, que es importante aprender de las lecciones pasadas y sentirnos felices con los buenos momentos, pero no nos hace bien continuar allí. Cuando en el presente nos aguardan mejores momentos y a veces pasan y no nos damos cuenta. Por eso déjalo ir, suelta todo lo que no te acompaña en el presente, lo que te hizo daño y lo que ya pasó. Crea nuevas metas, vive al máximo cada instante. Consciente de lo que ocurre a tu alrededor para dejar atrás toda tristeza y amargura. Comienza a valorar lo que tienes en el presente.
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