Los niños se quedan en casa, pero por hoy… Así me dijeron al entrar en una famosa farmacia cuando me confundieron con una niña y es que mi estatura no ayuda, pero estoy conforme con ella. Sin mi estatura no sería yo. La verdad es que a veces soy niña, para entrar a la farmacia debi ser como cuando era niña. En estos días para mi es un reto salir y más hacer compras, ya que esto me genera estrés y me puede llevar a la ansiedad. Sin embargo, día tras día he aprendido a comenzar a manejar este cambio. Me hablo a mi misma, diciendo que lo puedo lograr, que estaré bien y tomo las debidas precauciones cuando salgo. Y es que esta pandemia a todos nos cambió, de alguna forma u otra. Es un impacto en nuestra vida. Cuando era niña no pensaba mucho, no me preocupaba por las cosas que no podía controlar y siempre tenía una ocurrencia. A veces hay que llamar a nuestro niño interior, ese que se ríe de todo, que disfruta cada momento, pero también es obediente a la voz de lo